30/12/14

Generación Y


Si preguntásemos a jóvenes de dieciocho años con que partido político se sienten identificados, cual es su ideología o que instituciones merecen su confianza, probablemente nos encontraríamos con un alto porcentaje de respuestas relacionadas con toda la información que comparten en las redes sociales. Si a lo anterior, añadimos algunas cuestiones sobre su grado de aceptación del tipo de sociedad en la que viven, nos sorprendería una cierta unanimidad en sus críticas, entre otras, a las estructuras jerárquicas y a los abusos de las élites económicas.
La generación Y, la mejor formada e informada, huye de los convencionalismos, retrasando los ritos de la edad adulta. Convierten lo local en global sin dificultad, inventando un mundo que multiplica el intercambio de bienes y servicios de una manera cada vez más rápida, fácil y barata. 
Los nativos de la era digital buscan la innovación constante, normalizan la necesidad del fracaso como aprendizaje y desarrollan proyectos que aportan soluciones para un gigantesco número de usuarios. A estos hijos de la revolución tecnológica no les importan tanto los símbolos, ni la raza o la religión, sino la capacidad para crear aplicaciones que cambien nuestra vida, incluso las que no obtienen grandes beneficios a corto plazo. Su objetivo es integrar, no dividir, y esto va a provocar enormes transformaciones en la forma de concebir las relaciones humanas.

Los futuros responsables de tomar decisiones que afectarán a la comunidad, entienden el liderazgo en equipo, favoreciendo mayor participación y horizontalidad en los procesos sociales. Asimilan la transparencia con naturalidad, de tal modo que los mecanismos de control de la población mediante el espionaje, ejercidos por grandes corporaciones o agencias de seguridad, están teniendo que enfrentarse a las mismas acciones en sentido inverso. Aumenta la puesta en circulación de información clasificada, por parte de organizaciones que destapan violaciones de los derechos humanos o publican tramas orquestadas en despachos oficiales. La creciente imposibilidad de preservar la intimidad de personas y gobiernos provoca que los secretos terminen expuestos a la luz pública, como un gran hermano recabando datos y al servicio de la ciudadanía convertida en contra poder, ante las agresiones de estados o multinacionales.

El rechazo a los nacionalismos que justifican las fronteras apelando a las emociones, hace que la idea de patria empiece a asociarse a internet, el espacio sin muros ni banderas, donde pueden conectarse en tiempo real fomentando el asociacionismo entre particulares o grupos que, aún estando a miles de kilómetros, acaban estableciendo lazos de unión cuando ponen en común experiencias y conocimiento. Las distancias físicas y psicológicas desaparecen generando personas con un menor sentido de pertenencia a los límites geográficos de un territorio concreto.

Mientras los modelos conocidos se descubren obsoletos, comienza la gestación de una nueva cultura que construye referentes distintos en un entorno globalizado. En algunos aspectos, se están dando las condiciones para que el individualismo extremo, una vez superado el sistema actual, inicie la catarsis hacia un tipo de convivencia más racional y equilibrada, con la complicidad de los actuales niños, la generación Z.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 30/12/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/12/30/generacion/583114.html


26/11/14

La ambición de Rosseta


La infinita curiosidad del hombre se encuentra anclada a una roca, a 500.000 millones de kilómetros de nuestros anhelos. La sonda espacial Rosetta, después de diez años describiendo órbitas alrededor del sol, ha culminado parte de su misión con éxito, tras enviar al módulo Philae para que aterrizase en un cometa que viaja a 40.000 kilómetros por hora. Este ingenio de la robótica fue capaz, no sin dificultad, de taladrar la extrema dureza de la superficie y comenzar a transmitir datos, incluso antes de tomar tierra, hasta que entró en fase de hibernación, una vez agotadas sus baterías alimentadas por placas solares. Sus 95 kilos de peso terrestre equivalen a un ínfimo gramo sobre el amasijo de gases, polvo y hielo que componen uno entre millones de cuerpos celestes. Un hito científico que puede ayudar a comprender algo mejor las circunstancias que dieron lugar al origen de la vida tal y como la conocemos.


La inteligencia de los astrónomos—europeos en este caso— que son capaces de llevar a la práctica sus investigaciones, desarrollando nuevas aplicaciones tecnológicas, contrasta con la escasa competencia demostrada por el homo sapiens en otras facetas de la existencia. 

La visión a largo plazo es inherente a cualquier proyecto científico, pero no podemos decir lo mismo de cómo se manejan los tiempos cuando se trata de llegar a algún tipo de acuerdo entre las distintas etnias que colonizan nuestro diminuto rincón en el universo, y lejos de resolver sus conflictos históricos, insisten en mantener la llama del odio y la intolerancia, en la medida que les proporciona el único oxígeno con el que saben respirar.

La determinación y la voluntad que caracterizan a los trabajadores involucrados en un experimento-aventura sideral de tal magnitud, se manifiestan de un modo muy diferente en las reuniones que celebran los grupos de estados ricos, que en lugar de tomar decisiones encaminadas a erradicar la desigualdad y la pobreza, se dedican a planificar la forma de aumentar sus beneficios mediante mecanismos de dominio sobre el resto del planeta. 

Las grandes innovaciones que hacen evolucionar a la ciencia, se echan de menos en las actuaciones de los líderes políticos, cada vez más mediatizados por el poder económico. Su estancamiento se ve reflejado en discursos empantanados por el complicado equilibrio entre los cálculos electorales y el compromiso adquirido con los lobbys que los financian.

Si reuniéramos a un comité integrado por expertos en medicina, matemática, física, química, biología y filosofía, con el objetivo de hallar la fórmula de la felicidad, fracasarían estrepitosamente, pero sin embargo, nos acercarían al conocimiento de interesantes mundos microscópicos y fascinantes vacíos interestelares. 

Habría que preguntarle a Philae si los aminoácidos y las bacterias rastreados allá arriba, son similares a los que nos parieron, o si por el contrario, la condición humana sobrevive tan aplastada por el peso de la gravedad, que en sólo tres dimensiones es materialmente imposible que la ambición y la sabiduría caminen de la mano.


Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, e 26/11/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/11/27/ambicion-rosetta/577584.html


19/11/14

Identidad y crisis

Nos dirigimos a gran velocidad hacia la consecución de profundos cambios en la identidad colectiva. La crisis –palabra de origen griego cuyo significado original era decisión– se ha convertido en un instrumento con enorme capacidad transformadora. Las élites que han ejercido la hegemonía mediante el control, entre otros sectores, de los grandes medios de comunicación, están siendo desterradas por la ciudadanía.
La irrupción de líderes jóvenes, con discursos y maneras alejadas de un régimen petrificado e incapaz de asumir la realidad, es la mejor representación de un país decidido a pasar página. La regeneración no atañe sólo a nombres o a siglas, sino que involucra a la mayoría en un proyecto de futuro innovador, producto de la decadencia de las actuales estructuras oligárquicas.
El concepto de identidad nacional, definida por el sociólogo Zygmunt Bauman como una ficción, se basa en el sentimiento de pertenencia a un territorio y en la lealtad única, como fuente de seguridad y homogeneidad. El fenómeno de la globalización –en el ámbito económico, político y cultural–, provoca que las anteriores certezas ya no basten para entender el desafío que supone la complejidad de gestionar identidades múltiples. En el plano político, se abren alternativas al orden constitucional establecido y esto produce la inevitable aparición de grandes incertidumbres.
La capacidad para gestionar las contradicciones y ambigüedades inherentes a un proceso de fragmentación, supondrá el principal reto en la construcción de un modelo que deberá nacer, necesariamente, en un escenario de ruptura. El deseable consenso no se vislumbra como la clave maestra de un orden huérfano de referentes históricos, salvo la –todavía– vigente dialéctica derecha-izquierda.
La aparición de Podemos ha significado el revulsivo que abre la puerta a lo incierto. El crecimiento exponencial de esta formación transversal y pionera en la utilización de las nuevas tecnologías, no tiene precedentes. Tras el éxito abrumador en la elección de su cúpula dirigente, las preguntas superan claramente a las respuestas, ante la posibilidad de llegar a sustituir las propuestas por hechos en una meteórica ascensión al poder. Y esa es precisamente su fuerza, cuando los antiguos clichés son trastos inservibles, la sociedad esta dispuesta a creer en algo que posee el irresistible encanto de la experimentación, la frescura de lo novedoso.
La democracia entra en el laboratorio y con ella todos nosotros, los partícipes, voluntarios o no, de acontecimientos que van a cimentar la creación de aquéllo que ignoramos, que no tiene nombre, que no sabemos identificar, es decir, que reúne las condiciones indispensables para erigirse en el paradigma de un nuevo contrato social.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 19/11/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/11/20/identidad-crisis/576221.html


13/11/14

En ausencia de Rajoy

"Conmigo la unidad de la nación está garantizada. No lo duden. Porque hay que hacer las cosas bien y tal". Estas palabras significan, al igual que todas las anteriores afirmaciones de Rajoy, exactamente lo contrario de lo que aparentan. Hace mucho tiempo que la pretendida indivisibilidad del estado se rompió por las costuras catalanas y el desgarrón institucional ya no se puede arreglar con un simple zurcido. La inquietante falta de diálogo conduce a un escenario de ruptura total. La hoja de ruta del proceso independentista en Cataluña continúa su camino sin más obstáculos de los previstos. Han trazado una estrategia nítida, tomando la delantera en cada una de las iniciativas políticas que van llevando a cabo, ante la pasividad manifiesta de un dirigente tan pachorrudo que raya en lo suicida.

Como en la novela breve de Muñoz Molina "En ausencia de Blanca", pareciera que un extraño ha usurpado el cuerpo de Rajoy, declarándolo en estado ausente. Mariano sigue comportándose casi igual pero, en el fondo, se le percibe distinto, un hecho que comienza a provocar la desconfianza en su propio partido. Alguien que habla de la misma manera, como siempre que abre los ojos mientras balbucea obviedades, tratando de transmitir firmeza, aunque, podría ocurrir que la esencia haya cambiado, o peor aún, surge la sospecha de que quizás fue siempre así y era la fascinación que engañaba al sentido común. Ahora, el partido popular se enfrenta a la tesitura de tener que aceptar esta sorprendente evidencia, o debatirse entre lo que creía ser y ahora descubre que no es.
La perfección de la mayoría absoluta se derrumba. Las promesas de recuperación económica caen en saco roto, cuando lo que se vislumbra en el horizonte cercano son las luces rojas de una nueva recesión en Europa. De nuevo, apelamos al hombre con visión, al guía que nos conduzca en este valle de tinieblas macroeconómicas, aquel que establezca una relación de confianza con un país decepcionado de sí mismo, el hábil negociador que sepa dar una salida integradora al desafío secesionista, el gran demócrata que siembre en una tierra fresca la semilla de un árbol nuevo, la esperanza redentora para una comunidad que se ha entregado al destripamiento generalizado.
El desengaño se hace carne, gafas, barba y puro en el perfil de un administrador de la propiedad cualquiera, un ladrón de cargos, un impostor.

Mariano Rajoy Brey ocupa el puesto que debería pertenecer a otro, incurre en una continua dejación de las responsabilidades que tendrían que corresponder a otro. Una vez más, la realidad impone su ley y sería deseable que el muy subestimado Artur Mas se sentase a discutir con alguien que merezca llamarse presidente del gobierno.
Un conflicto identitario no se puede dejar en manos de un sujeto especializado en inhibirse y mirar hacia otra parte. La actitud de la evasión, lejos de solucionar un problema, lo aplaza, alimentando el odio. Luego, cuando resurge con más fuerza, la misma debilidad vuelve a aplazarlo, hasta que brota de nuevo para estallar con una dimensión desconocida, la insólita gravedad que no tenía al principio.
La fría inteligencia pragmática es el falso atributo que esconde una terrible y temible cobardía política. Algo que pagaremos muy caro, si nada ni nadie lo remedia.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 13 de noviembre de 2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/11/13/ausencia-rajoy/574910.html


6/11/14

Bravo Teresa

Estuviste ahí, aturdida, en el centro del grupo que te acoge como el milagro de un éxito colectivo. Tu cara denota el cansancio propio de quien ha librado una guerra en la mayor de las soledades, con la muerte acechando entre penumbras, en la cama de una habitación aséptica. Lo has conseguido con la ayuda de los doctores y enfermeros, tus compañeros, tu familia. Los profesionales de la sanidad están de enhorabuena, y ni el gran monstruo mediático podrá devorar este emocionante y merecido homenaje a tu salud, a la de todos.
Teresa Romero será dada de alta hoy tras 30 días de hospitalización
Ahora muchos se darán cuenta del coraje que atesoran tantas personas anónimas que viven para ayudar a los demás, el personal sanitario en hospitales y clínicas, de cualquier parte del mundo. Las horas de trabajo acumuladas, el esfuerzo, la superación personal, absorbiendo la experiencia construida por miles de historias felices o amargas, y no siempre en las mejores condiciones de seguridad. En tu ojos se adivina la determinación y entereza habituales en los seres que anteponen el cuidado del prójimo al suyo propio. La fortaleza de un espíritu generoso y alejado del individualismo extremo que consumimos a diario en nuestra sociedad del miedo desarrollado.
Tu triunfo lo comparten muchos, tus méritos, la honradez y el buen hacer, a pesar de los que pretendieron utilizarte como un instrumento de manipulación, ensuciando tu nombre por intereses rastreros, culpabilizándote para eludir su responsabilidad. Las justificaciones y excusas mediocres de calamitosos representantes públicos, desde la desastrosa gestión de una ministra inútil hasta las desgraciadas declaraciones de un despreciable consejero de sanidad, personajes muy por debajo de tu nivel humano.
La pléyade de comentaristas, tertulianos y expertos todólogos continuarán debatiendo y llenando de una nada indigesta la rabiosa actualidad, mientras vas dirigiendo tu lenta recuperación hacia un silencioso olvido con mínimas secuelas, tras protagonizar alguna suculenta entrevista que dispare el medidor del share.
Mañana leerás tu nombre en grandes titulares: Teresa Romero sale del hospital. Sí, estarán hablando de ti para ganar el interés de las audiencias, porque eso es lo único que importa. Comunicar y despertar el deseo inmediato en el espectador-votante-consumidor. Comprobarás cómo las grandes cuestiones se tratan con superficialidad, esgrimiendo argumentos gratuitos que rellenan horas de vacío, para disolverse luego con la misma facilidad. Las polémicas se inflan y desinflan en un bucle insensato. Crean opiniones carentes de un fondo de solidez que las sustente. Vivimos un tiempo en el que se venden modelos de futuro, ya no hay ideas.
A partir de este momento, tu ánimo debería servir de ejemplo para un país en el que soplan vientos de cambio, y que va a tener que luchar muy duro, como tú lo has hecho, por levantarse del letargo y reunir la valentía necesaria para generar ilusión y volver a creer en un proyecto común. 

30/10/14

Demagogia en la alambrada

Al menos doce inmigrantes, encaramados en la valla de Melilla frente al campo de golf situado al lado de la alambrada que separa la ciudad autónoma de Marruecos/ Fotografía: José Palazón-Prodein
Fotografía de José Palazón
En primer plano, dos mujeres golfistas practicando, el lugar es paradisíaco. Un césped perfecto brilla al sol, mullido tapiz bajo elegantes palmeras y antes de llegar al final del campo, algo de vegetación, pero más seca. Detrás, la espesura verde trata de disimular –sin éxito– la línea divisoria entre dos realidades opuestas. Casi sin querer, elevamos la vista recorriendo los metros de una valla metálica que emerge –altísima– en segundo plano, rompiendo la estética de la imagen. Subidos a la alambrada, al menos once hombres tratando de guardar un precario equilibrio. La mitad parecen mantenerse estables, sentados con una pierna a cada lado, una extremidad colgada en su mundo y la otra invadiendo el nuestro.
A la derecha, un solitario policía fronterizo –o guardia civil– subido en una escalera apoyada sobre la malla cortante, que imita a los aprendices de inmigrante ilegal pobre –si fueran ricos serían legales–, adoptando la misma postura que ellos, con el casco reglamentario bien puesto en la cabeza, y mirando hacia abajo. Podemos deducir que los demás uniformados estarán aguardando, a la espera de un resultado positivo en las conversaciones de paz, que se desarrollan con dificultad en tan estratégico lugar.
Las vistas desde allá arriba deben ser impresionantes, seguro que los monigotes oscuros –una categoría inferior de personas– divisan las bolas como pequeñas esferas blancas que salen disparadas por el golpeo seco de los arrogantes palos. Y lo más curioso es que, observando la foto, el tremendo contraste que conmueve, se vuelve normal. De repente, te das cuenta de que los protagonistas, en ambos casos, parecen encontrarse ajenos a lo que tienen enfrente. Van a lo suyo, tanto los animales aspirantes a progresar en la escala evolutiva, viviendo una peligrosa y de antemano fracasada aventura, como las habitantes de la zona desinfectada empleándose a fondo con el swing.

Es asombroso como nos hemos acostumbrado a ver cualquier cosa sin que la zozobra nos invada más allá de quince minutos. Nos tragamos las injusticias y los desequilibrios con una facilidad pasmosa. Luego, nos enteramos de que la construcción del campo de golf fue financiada por los fondos europeos y que su polémica gestión privada esta dirigida por un mecenas de la prensa local que cobra del ayuntamiento. En fin, la versión melillense de la marca España. Encima, desperdician una gran cantidad de agua potable para regar, y ahí volvemos a nuestros sufridos morenitos que igual pasan sed, hambre y frío.


Con permiso de El Roto.
Además, está el espinoso asunto de la demagogia, que algunos utilizan para denunciar un cierto halo de manipulación emocional, cuando nos plantan ante los ojos una visión un poco más incómoda de lo habitual, molesta, ingrata, rebuscada, que en realidad no nos lleva a ninguna solución razonable, salvo la que más nos conviene: una solemne pasividad. Lo mismo ocurriría si imaginamos una foto muy distinta –y parecida a la vez–, la de un mendigo que observa desde la calle a Rodrigo Rato comiendo en un restaurante caro. El grueso cristal y los guardaespaldas vigilando también funcionan como elementos sólidos, que marcan la distancia entre un demagogo de la miseria y el ejemplo de ciudadano que ostenta una clarísima superioridad intelectual. Y aunque sustituyamos a estas personas por otras, la cuestión permanecerá siempre, porque casi nadie tiene intención real de cambiar absolutamente nada.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 30/10/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/10/30/demagogia-alambrada/572229.html

22/10/14

Rivero y Mas


A pesar de que ambos viven su particular ocaso político, la obcecación continúa presidiendo las conexiones neuronales de Paulino y Artur, dos solitarios corredores de fondo. Quizás, a estas alturas, hayan olvidado el mandato que los subordinaba a representar el interés general, para dedicarse en exclusiva a la encomiable tarea de erigirse, con atroz terquedad, en magníficos portavoces de sí mismos. El último monólogo del President catalán anunciando la próxima "convocatoria de participación ciudadana" en lugar de la consulta prometida del 9-N, debería constituir la actuación estrella en un programa especial del club de la comedia.

La diatriba en forma de artículo del premier canario –o de quien lo haya redactado– sobre un soberanismo time sharing, se corresponde no solo con un incurable afán de protagonismo, sino que certifica la irresponsable deriva política en la que incurre, al teorizar alegremente sobre un supuesto proceso del que nadie, que sepamos, sabe absolutamente nada.
Las pretensiones, ocurrencias y planteamientos miopes de estos dos mandatarios llevan camino de convertirlos en peligrosos floreros, incluso antes de que se vayan o les enseñen la puerta de salida en sus propios partidos.
Mas estiró tanto el chicle que ya se le rompió y no le queda otro remedio que convocar unas elecciones endiabladas y en clave de plebiscito, con resultados imprevisibles salvó el anunciado derrumbe de Convergència –con o sin Unió– en favor de Esquerra Republicana y de la nueva ola regeneradora que barre el país.

Rivero anda jugando, en el argot deportivo, los minutos de la basura, fotografiándose en la puerta del Congreso a modo de heroico abanderado con corbata, en nombre de un movimiento contrario a las prospecciones petrolíferas, que en absoluto le pertenece, para ir a buscar más tarde el reconocimiento como nuevo y audaz referente de la invisible corriente independentista canaria.

Artur y Paulino harían bien en utilizar su inteligencia y la experiencia acumulada, y hacernos un favor a los que andamos preocupados por los problemas reales en esta maltrecha democracia, es decir, a la mayoría de la población. Tienen en su poder la gran oportunidad de presentar batalla contra la pobreza infantil, el paro de larga duración, la exclusión social, defender los servicios básicos, la sanidad, la educación, la dependencia, en fin, todos esos problemitas estructurales que soportan tantas familias con admirable entereza. Una magnífica ocasión para limpiar un poco el fango diario, en vez de generar aún más descrédito en una opinión pública saturada de ver y escuchar la increíble cantidad de mentiras, poses de cara a la galería y discursos vacíos que rebosan la paciencia colectiva.
Mientras la gente se organiza en asambleas, estos dos maestros de la vieja política no abandonan la sana costumbre de auto promocionarse en la tarta mediática, arrimando el mechero a las últimas velas que siguen en pie, acompañados de sus fieles comparsas.
En agradecimiento a los servicios prestados, cantemos todos, entre resoplidos y eructos, un satisfecho hasta siempre feliz.



Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 22 de octubre de 2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/10/22/rivero/570721.html



16/10/14

Epidemia informativa



Hay que ver cuánto sabemos del ébola, sobre todo desde que la auxiliar de enfermería conocida como Teresa –considerada culpable, víctima inocente y en último término, heroína que ayuda a los médicos que la atienden– lucha por su vida en el desmantelado, luego recuperado y después muy valioso Hospital Carlos III. Tuvo que llegar el virus letal para que volviésemos nuestra cara horrorizada hacia África, ese continente lleno de pobres negros y de negros pobres a los que deberíamos ayudar más, tras comprobar que el miedo ancestral se nos ha colado por la rendija de un guante mal quitado o quien sabe, pero ya se encarga la pandemia informativa de explicarnos cuál es el protocolo exacto que debemos seguir para colocarnos el traje protector.
Mira por dónde, que nos acabamos de enterar –antes lo decían pero no escuchábamos bien– que el número de fallecidos ronda los 4.000 y que existen tres países llamados Liberia, Sierra Leona y otro más, en los que, además de safaris, hay Organizaciones No Gubernamentales, como Médicos del Mundo trabajando sobre el terreno. Profesionales sanitarios que conviven con el riesgo de contagio, o peor aún, con la posibilidad de encontrar la muerte ayudando a esos desgraciados que besan a sus fallecidos. Pero es que además, los hospitales de campaña no dan abasto y los mandan a sus casas. ¡imagínate, contagiándose unos a otros los negros ignorantes!.
Son problemas del Tercer Mundo que, cuando se nos aparecen por aquí, al lado de casa, nos entra el pánico y el gobierno no ha previsto esta situación, y la ministra es un desastre, y por qué nos tiene que pasar esto a nosotros, con lo tranquilos que estábamos entretenidos con la independencia de Cataluña y las black cards –que parece el nombre de una banda de hard core–.
Así nos va, el primer lugar de Europa que monta una estrambótica presentación en sociedad de esta nueva amenaza biológica. Y no hay vacunas todavía, sólo experimentales, y difíciles de conseguir, ¡no hay derecho!. Conocemos todos los datos, el tiempo de incubación, las vías de contagio, el número de personas en cuarentena por petición propia, el de las que han estado en contacto con la mediática, enfermera y paciente Teresa, denominadas como bajo riesgo, a las que se hace un seguimiento, ¡por si acaso!.
Ya quitaron de en medio a Ana Mato y pusieron a súper Soraya al frente de la crisis con un comité de expertos. Todo comienza a estar controlado.¡ Vaya, sorpresa!, Teresa experimenta una leve mejoría, con suerte igual se salva y, si nadie más cae enfermo, sería la leche.
Con permiso de Forges.
Entonces, volvamos a dejar a los africanos donde están, ellos allí con las fronteras cerradas para que no se escape ninguno, y nosotros aquí, que ya tenemos bastante con la corrupción, los recortes, el fútbol, el desafío secesionista y demás temas de interés.
Lo que está claro es que la desigualdad y la pobreza son cosas que no podemos arreglar, se trata de sociedades subdesarrolladas, así que les enviamos comida, ropa, o los medicamentos que están a punto de caducarse. Somos solidarios, pero no nos presionen tanto que tenemos que pagar la hipoteca, las clases particulares de inglés, las de baile, los restaurantes, hoteles, coches, gasolina. Y el petróleo es malo, aunque si Marruecos lo saca, que más dará.
Propongo un referéndum ciudadano, la madre de todas las consultas. Una pregunta corta y fácil: ¿Se siente usted bien con la epidemia informativa?

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 16/10/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/10/16/epidemia-informativa/569586.html

9/10/14

El paraguas chino



La revolución democrática global vuelve a asomar la cabeza, esta vez en el distrito financiero del gigante asiático. Son jóvenes universitarios en su mayoría, nacidos con el comienzo de la nueva era digital y manejan muchísima información. Comparten miles de contenidos, contrastan opiniones diversas, debaten, piensan y sienten por sí mismos. Constituyen un sector crítico que aspira a transformar la versión oficial de la realidad. Enfrente se sitúa el Goliat representado por un bloque monolítico que observa, entre el asombro y la incredulidad, a este David organizado que lo desafía agitando los móviles encendidos, para reclamar algo tan sencillo de entender, como la evolución hacia una democracia basada en garantizar plena libertad de elección de los candidatos a representantes públicos, lo que implicaría la práctica desaparición del férreo control gubernamental.
La secuela de la revuelta en la Plaza de Tian´anmen se presenta, veinticinco años después, ante los sorprendidos ojos del viejo aparato, con el mundo siguiendo on line el pulso de las manifestaciones coordinadas por la inteligencia del pacifismo desobediente. Las analogías con movimientos como el 15-M y Ocuppy Wall Street son evidentes, de tal modo, que se puede considerar como otro eslabón más en la cadena de una reacción globalizada contra las formas de poder contemporáneas.
Se está produciendo la gestación de una nueva cultura mundial que protesta contra lo que considera injusto, que no acepta los desequilibrios ocasionados por el capitalismo financiero de última generación, que desea acabar con los moldes antiguos. Cuestiones como la toma de conciencia colectiva sobre los efectos del cambio climático están íntimamente relacionadas con la demanda generalizada de un cambio de modelo en las relaciones económicas, sociales y políticas. Esta tendencia avanza en paralelo a una revolución tecnológica sin precedentes y los sistemas actuales de gobierno apenas albergan una mínima capacidad de respuesta, pues sus estructuras continúan anquilosadas en la rigidez del orden jerárquico. La continua interacción entre las personas en red supera la vieja necesidad de contar con agentes de intermediación. Los actores políticos clásicos junto con sus medios de comunicación y persuasión pierden vigencia en favor de la transparencia y la horizontalidad en los procesos de decisión.
En el interior del continente, la China rural convive con la consolidación de la economía de mercado en la gran potencia fabricante de casi todo lo que consumimos en Occidente. La nación con 1.300 millones de habitantes, que tiene por delante el reto de la ineludible y compleja transición hacia el paradigma de una sociedad moderna.
En la futurista urbe de Hong-Kong, los paraguas chinos se abren para protegerse de la violencia de estado y, vistos desde arriba, forman un mosaico multicolor en nombre de la paz y el amor. Cualquier organización hegemónica que pretenda destrozar esta metafórica declaración universal de intenciones, tiene el tiempo contado. Goliat percibe el peligro y propone una negociación a David, para que detenga la revuelta convertida en fenómeno viral. 
La presión ciudadana se va haciendo cada vez más fuerte y conseguirá que el miedo cambie de bando.

3/10/14

Cauran tots


El don entró en la sala del Parlament y un silencio incómodo se iba abriendo ante su experimentada firmeza. El gesto cabreado del padrino amedrentó a los herederos políticos de la familia, que contuvieron el deseo de salir corriendo entre reverencias y prefirieron mantenerse quietos, evitando ser reconocidos por la mirada inquisidora, como testigos cómplices de un mal trago disfrazado de comparecencia.
Los rostros encogidos denotaban el respetuoso temor que el jefe del clan sigue inspirando a sus atribulados sucesores. Cuando tomó la palabra, este hombre bajito de estatura se agigantó y a cada frase certera que pronunciaba, acompañada del enérgico movimiento de su brazo derecho, la audiencia empequeñecía. Tan sólo dos o tres osados se atrevieron a inquirir, cuestionando el discurso autoritario de uno de los animales políticos más influyentes de los últimos cuarenta años.
Después de haber confesado un delito –o varios– por decisión propia y sin que nadie le hubiese preguntado, la plácida senectud mutó en delirante rabieta a modo de viejo cascarrabias que increpa a sus nietos, afeándoles la conducta, por insultar con frivolidad nada menos que al abuelo fundador del nacionalismo pragmático, al máximo responsable de los pactos interesados con el estado centralista, al que tiene tu misma sangre, al que habla tu misma lengua, al molt intocable Jordi Pujol.
El esperpento democrático se apareció en forma de líder a la antigua usanza, como un fantasma amenazador que culminaba su bravata trasnochada con una frase antológica, el mensaje que resume la actualidad de una oligarquía política y financiera en proceso de descomposición. Si una rama del árbol ( sistema corrupto ) se rompe, las demás ( formaciones políticas ) también caerán. Caerán todos. Esta aseveración le salió de las entrañas a uno de los últimos representantes de un régimen caduco, que el bipartidismo imperante se empeña en prolongar inútilmente.
Otra prueba más de que ha llegado la hora de redactar una nueva hoja de ruta constitucional que, a través del consenso, actualice nuestro proyecto de convivencia. La transformación del poder de las elites en mecanismos abiertos a una sociedad que demanda un profundo cambio en el fondo y en las formas. La ciudadanía ya no cree en conflictos inventados para distraer su atención de lo que verdaderamente le importa. La gente se esta fabricando sus propias preguntas y comienza a encontrar las respuestas.

Si yo caigo, todos los demás también. Así sea.


Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 03/10/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/10/03/cauran-tots/567272.html



25/9/14

El otro Pedro


Pedro Sánchez recorre las televisiones a la búsqueda de los votos perdidos. Aparece en prime time entrando en el plató sonriente y desenvuelto, en un honrado esfuerzo por parecerse a alguien joven, dinámico, sensible, la pareja que cualquier madre querría para su hija, el rostro fresco de un nuevo líder, el mejor representante de la regeneración democrática, el antídoto a Pablo Iglesias.
Pero hay algo que no termina de encajar. Quizás sea el peinado demasiado perfecto, o tal vez los dientes tan blancos, quién sabe si cuando llega a casa habla del mismo modo, con esa estudiada sintaxis, loable y desesperada pretensión por ganar firmeza. ¿Se soltará el pelo en la intimidad, mascullando exabruptos o mantendrá el tono preciso, correcto, vocalizando hasta el aburrimiento?.
Resultar creíble generar ilusión, emocionar. Todo lo que hace el último producto comercial del partido socialista obsoleto español, va encaminado al titánico objetivo de frenar el derrumbamiento de unas siglas y su significado histórico. Y no escatimará ninguna posibilidad que le pueda acercar a donde están los ciudadanos, según sus propias palabras, cuando llamaba en directo al programa campeón de la incultura hispánica: Si se trata de entrar en millones de casas a través del Sálvame, estoy encantado. Si tengo que someterme a los experimentos frikis del Hormiguero, allá voy raudo. Lo mismo me da una declaración en el Congreso que hacerme un selfie con el presentador más mediático que haya. Aquí estoy, como un Clark Kent descubriendo al Superman del siglo XXI, el novio progre de la Barbie, un hijo formal de clase media. Soy un hombre sano, deportista, llevo una mochila copiada. Les presento este magnífico colchón. Lo que me ofrezcan. 
Se nota que eres un hombre de partido, fiel al stablishment, amamantado por Susana Díaz y debes sentir a menudo cómo te susurran la cantinela los viejos barones. En tus sueños, se repiten las mismas imágenes: grandes discursos que son letanías de los omnipresentes González y Guerra. Demasiado peso que cargar, amigo Pedro. Para romper con el pasado de verdad, no es suficiente el lavado de imagen ante los medios, porque la estructura sigue estando ahí, casi intacta.
Pedro Sánchez también es un hombre de estado y por tanto, socio que participa de los principales acuerdos con la otra pata del eje de poder político-económico, heredero de una transición que se ha vuelto intransitable. Sus críticas a Rajoy suenan a chiste y la responsabilidad de ejercer la más que imprescindible oposición al gobierno, no existe. Su capacidad de propiciar un auténtico cambio se parece mucho a cero. 
Has llegado tarde a la fiesta Pedro, a deshora, y encima estás muy sobrio como para poder comunicarte en igualdad de condiciones con los que llevamos bebiendo toda la noche. La izquierda se marchó hace rato, cansada de esperarte. Se fue con su amiga la utopía. Ahora se llevan genial. Hay que ver como cambian las cosas. Y por cierto, deberías hacerte amigo de esos a los que llamas populistas porque te niegas a pronunciar su nombre. No les tengas miedo. No te van a hacer daño, sólo dan voz a lo que piensa a gritos la inmensa mayoría. Tú no lo sabes, pero en realidad ellos te representan, a tu otro yo, no al que vemos delante de las cámaras. 
Ya te darás cuenta.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 25/09/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/09/25/pedro/565900.html


16/9/14

Desnudos en el Paraíso

La capacidad de sorpresa continúa superándose a sí misma ante el descubrimiento de nuevas certezas. El caudal informativo nos presenta un sistema con enormes agujeros en sus estructuras hegemónicas. Las mentiras del pasado salen a la luz señalando a representantes públicos que habían acumulado cierto grado de respetabilidad, y que ahora se declaran deshonestos o son acusados de cometer todo tipo de irregularidades desde posiciones de privilegio.
El poder estaba corrompido y lo sigue estando. Ya no cabe otra conclusión para resumir los usos y costumbres de todos aquellos que en algún momento fueron tentados por la codicia.
Sería injusto excluirnos –a la población en general– de la responsabilidad adquirida por haber convertido las prácticas poco éticas en una parte fundamental de nuestro modo de vida. La democracia real se construye entre todos y no debería dejarse en manos de la clase política, como un ente ajeno y abstracto, para que la gestionen en privado, sin contar con nuestra participación activa y frecuente. Es imposible cambiar todo lo que nos indigna limitándonos a la queja recurrente, como si fueran otros los que tienen que arreglarlo en nombre del pueblo, pero sin contar con su complicidad.
Tenemos mucho que decir y poseemos un alto grado de influencia en el diseño del nuevo tiempo que se avecina. El derrumbamiento del modelo anterior exige dar un paso adelante por parte de los protagonistas del relevo generacional. Los sectores sociales deben implicarse en la adopción de actitudes que promuevan la integración y la participación de la ciudadanía en ese proceso transformador. Las siglas o marcas políticas van a perder importancia en favor de la percepción que tengamos sobre la credibilidad de los aspirantes a administrar los desafíos de la globalización.
La historia de una tormenta financiera que desata varias crisis en un barco llamado fraude, nos reduce a la condición de náufragos arrojados a un paraíso que nos resulta extrañamente familiar. Nos encontramos desnudos de ideas y las referencias anteriores ya no sirven, así que nos toca inventar una alternativa a lo que conocemos. Un proyecto de economía al servicio del bien común y el influyente lobby ciudadano dedicándose a compartir cuotas de felicidad, repartiendo los dividendos para garantizar la estabilidad de los implicados en esta apasionante aventura.
En nuestro interior sabemos que no es el único, pero si el mejor camino que podríamos tomar.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 16/09/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/09/16/desnudos-paraiso/564303.html

10/9/14

Algo sobre la belleza

En el puerto viejo de Marsella encuentro una estructura cuyo techo es un gran espejo en el que me veo reflejado. La coincidencia con otros seres y esa imagen que nos mezclaba sobre un fondo de ondas azuladas. Nuestras vivencias individuales formando parte de este mar antiguo y conocedor de millones de historias. Pienso en ese lugar como un crisol que comprime la belleza, convirtiendo la diversidad en algo homogéneo. 
Las pupilas atrapadas en una puesta de sol frente a La Gomera. El cielo naranja que se va enrojeciendo, pausada, eternamente, hasta dar paso a la suave noche de verano. El espectáculo me sobrepasa y empequeñece la fatuidad de los actores cotidianos. La naturaleza sigue su curso, marcando el paso del tiempo, nuestro verdadero reloj vital.
La terraza parisina alrededor de una mesita redonda con el café, los croissants y un libro de notas, los dedos tecleando la pantalla. El instante único es un monumento a la felicidad, inmortalizada en la mirada de un escritor que al descubrir la ciudad, se descubre a sí mismo. Mis hijos saltando en una cama elástica, me parece que rozan las nubes. Los juegos infantiles rompen las defensas que interpone el pesimismo, y su movimiento invita a nuestra imaginación a saltar con ellos. Podemos sentir que flotamos sobre los problemas y aquello que parecía insuperable, se vuelve circunstancial y pasajero.
El grupo de música árabe tocando en una esquina del Barrio Gótico, un eco de vibraciones ancestrales recorre las grietas de la memoria, rellenándolas de aprendizaje.
La belleza del Antártico, tanto que duele verla. El tiempo se detiene. Los glaciares almacenando la información, testimonio del acontecer que permite a los científicos estudiar el pasado para mejorar el futuro. La imponente presencia de un oso polar, esa belleza salvaje nos identifica con el medio natural. Estamos integrados en un sistema global, provisto de fuerzas que se contrarrestan para conseguir el equilibrio. La capacidad de la eterna lucha por la supervivencia, el desarrollo de las investigaciones que nos hacen evolucionar. El progreso humano en el medidor de la temperatura, y una bandera de paz clavada en el centro del continente helado.
Dos bailarines danzan en el escenario, pasión, tristeza, amor, duelo, alegría, muerte. La relación entre dos cuerpos bellos que se abrazan, que se besan, que discuten, que se alejan y vuelven a acercarse, en un continuo vaivén de emociones. La explicación de nuestras contradicciones, la imperfección humana ejecutada de manera casi perfecta, mostrando el sentido de una existencia efímera, pero sólo un momento de lucidez equivale al universo entero. Esta belleza artística y espiritual conecta con el dios que llevamos dentro.
Roma, la gran belleza de un mito en decadencia. La magistral ceremonia cinematográfica de Sorrentino, pletórica de colores y de personajes en el filo del surrealismo. Los años pasan y la belleza continúa ahí, en las ruinas de una civilización que se resiste a perder su magnificencia. Las risas en la comida con los amigos, la complicidad de vernos madurar, y de saber que seguiremos repitiendo los rituales, por encima de todo. La magia de la belleza cabe en una pequeña gota de lluvia en el parabrisas. La belleza modula nuestra visión subjetiva y resuelve el conflicto con la realidad. 


Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife, el 10/09/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/09/11/belleza/563537.html



30/8/14

El sueño de Exon

En la imagen, caganers de Merkel y Rajoy. Foto: GTres
Imaginemos a Rajoy y Merkel en la nave nodriza. Acaban de colonizar el planeta Exon. Se trata de un lugar con importantes reservas de agua y la cantidad de oxígeno suficiente. El progreso basado en criterios de racionalidad, respecto a la utilización de los recursos naturales, conforma un modelo económico que marca el desarrollo de la sociedad exonita. Priorizar la supervivencia del colectivo es lo que permite crecer a esta pequeña comunidad experimental. La asignación equitativa de los impuestos, genera el necesario equilibrio en la distribución de la riqueza y garantiza el derecho a disponer de servicios públicos en Sanidad, Educación y Servicios Sociales. Lo llaman nuevo bienestar social exonita.
Pero con el tiempo, el negocio inmobiliario se desboca, implicando a políticos y constructores en actividades de enriquecimiento ilícito. Algunos grupos de individuos consiguen hacerse con el control de las materias primas y acaparan el poder. Otro sector maneja el dinero circulante, de tal modo que se adueña de la capacidad para conceder créditos contraídos por los deudores, convirtiéndose en un temible instrumento de opresión, ya que es el único medio conocido para obtener el título de una propiedad. Luego, ocurre que los exonitas endeudados no pueden pagar las deudas, debido a que se produce una saturación en el mercado de valores que opera al margen de la producción real de bienes y servicios, lo que origina desconfianza en los acreedores. El tinglado financiero se viene abajo y provoca un crack. Rajoy y Merkel deciden entonces que tienen que rescatar a los que han originado el problema, castigando al resto de la población exonita con recortes que justifican por la insostenibilidad del sistema.
Los exonitas ven como los valores de la sociedad que habían construido son sustituidos por otros que proclaman las bondades de la gestión privada sobre el despilfarro del gasto público. Los ciudadanos del planeta Exon no llegan a comprender el motivo por el que se aprueban nuevas leyes que empeoran sus condiciones laborales, reduciendo los salarios, mientras que la minoría rica continúa disfrutando de los favores políticos de Rajoy y Merkel. Las grandes corporaciones compran los principales medios de comunicación exonitas. La estrategia hegemónica ejerce el dominio sobre la inmensa mayoría, mediante maniobras de entretenimiento y terapias de shock, para disuadir a quien pretenda cambiar el orden establecido. Operan en las voluntades inoculando la idea de que no hay alternativa posible. La brecha social se agranda.
Planeta Imaginario – Que Me Dices (2002) [MP3]
Portada del disco "Qué me dices" del grupo Planeta Imaginario
En la universidad pública exonita surge un grupo rebelde de profesores disidentes que forman círculos de reflexión y debate crítico. La explosión del descontento se politiza y los círculos se expanden por la periferia de la gran urbe exonita. Rajoy y Merkel alertan sobre el riesgo potencial de los radicales que amenazan la seguridad y redoblan sus esfuerzos en aplicar las recetas adecuadas, según ellos, para evitar el marasmo.
El contra poder social de los indignados exonitas se organiza y cuestiona el sistema económico imperante. Reclaman volver a los tiempos del desembarco en Exon, cuando el igualitarismo, dentro de un marco de libertades, constituía el elemento armonizador del grupo.

Rajoy y Merkel continúan empecinados en apoyar un modelo insolidario y en vías de extinción, dando la espalda a la voz de los silenciados por el ruido que emite la maquinaria del dinero.

El sueño de Exon consiste en recuperar la dignidad. La ideología neoliberal terrestre había destruido su identidad como especie que encontraba, en la asociación, el modo más sensato de convivencia.
El pueblo exonita logra empoderarse y refunda el gobierno. Rajoy y Merkel son desterrados a La Tierra, el planeta azul que, en un pasado remoto, habían pintado de gris.

Artículo publicado en el Diario La Opinión de Tenerife el 30/08/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/08/30/sueno-exon/561716.html


15/8/14

Turismo cosmético

La muchedumbre veraniega devora otro sudoroso agosto. Millones de adictos a la escapada repiten su ansiosa búsqueda de placer en múltiples destinos vacacionales cuya belleza se pierde por el sumidero, desbordados por la saturación humana. La maquinaria hotelera rechina en la ceremonia diaria de deglutir y escupir clientes moderadamente satisfechos. Cruceros gigantes cargan miles de pasajeros que desembarcan en cada puerto al vertiginoso ritmo de una manada frenética.

Un cierto aire decadente envuelve a muchos de los lugares históricos que en otro tiempo llenaban la vasija de la curiosidad con conocimientos y experiencias enriquecedoras. De algún modo, el lugar era el que encontraba al visitante y lo sorprendía callejeando sin la rigidez de un itinerario establecido de antemano. Ahora, el objetivo consiste en disfrutar a toda máquina, a base de sensaciones que son productos envasados para dar una respuesta a la medida del consumo de masas. La mirada crítica del grupo no varía mucho respecto de la individual, pues no hay intención de darse un respiro para reflexionar sobre lo observado. Todo se reduce al mismo entretenimiento liviano y banal que va llenando el vacío con emociones sucedáneas de felicidad.
El turismo globalizado recorre calles comerciales idénticas, soporta con estoicismo largas colas en las franquicias de la moda barata para comprar las mismas marcas, y digiere con forzoso deleite los productos prefabricados en las multinacionales de la alimentación.
Hasta los parajes más recónditos han sido prostituidos por explotadores turísticos que acaban perdiendo el respeto por el entorno y por sí mismos. Una gran parte de los empresarios del sector y de irresponsables políticos sucumben a la ambición del negocio rápido y queman el potencial del territorio a base de aumentar las plazas hoteleras, ofreciendo precios más económicos para mantener el excesivo volumen de ocupación, con lo que se produce una clara merma en la calidad de todos los servicios.
El culto a la apariencia es el referente del mundo cosmético. Esta realidad se refleja en la angustiosa desesperación de la sociedad de consumo por obtener beneficios inmediatos, o en la construcción de aberrantes complejos dedicados a prometer una habitación con vistas desde una montaña de bloques, a la caza y captura del ocio total como antídoto a nuestra creciente soledad.

Artículo publicado en el Diario "La Opinión" de Tenerife el 15/08/2014
http://www.laopinion.es/opinion/2014/08/15/turismo-cosmetico/559142.html